CATÁRSIS

Me escribo, me publico, pasan unos días y me leo. Me sirve. Me recuerdo cosas, me entiendo más.

Me siento inquieta por dentro, tirando hacia la ansiedad... quiero cerrar este ciclo que no me ha gustado de mi vida, pero se extiende. Quiero ser expeditiva, como era antes.

Cerrarlo.

Me entusiasmo y desentusiasmo según van pasando las horas.

Necesito energía encaminada, y voluntad.

Rasqueteando la limosna.

Lo bueno:

1. Medio día, pocos días.
2. Horario relativamente flexible.
3. Es trabajo, y el trabajo dignifica.
4. Experiencia, aprendizaje.

Lo malo:

1. Laburo en negro: no hay contrato, ni obra social, ni aportes, ni aguinaldo, ni vacaciones.
2. Cierto "compromiso" por ser familias conocidas.
3. Excesiva demora (y a veces "olvido") en el pago, y se complica andar pidiendo por el "compromiso" antes mencionado.
4. Sueldo miserable.
5. Horario feo.
6. Aspectos chantas hacia otra gente de parte de mis jefes.
7. Personalidad sobrebia de mis jefes.
8. Imposibilidad de ascender.
9. Desorganización general.
10. Paso frío.
    

Voy a extenderme un poco más en el tema del sueldo, más allá de que es bajo (en todo caso yo consentí el monto)... pero me incomoda de sobremanera las demoras en cobrar. Y más aun que mis jefes se "olviden" de pagarme, hijos de puta!! Me incomoda de más tener que andar pidiéndoles que me paguen, más cuando me dicen "aah... en serio no te pagué?", y me incomoda sobre todo sabiendo que nuestras familias son tan conocidas, el compromiso que se genera ahi. Por un lado sé que me tratan bien porque les interesan eventuales negocios que puedan salir con mi padre. Hasta hoy no le he contado nada ami padre sobre estos detalles (y otros) pero creo que hay un límite. Ayer me dijeron que el sueldo de hace dos meses ya me lo van a pagar, lo piensan sacar de cuando un cliente les pague un laburo (que hice yo) que era medio en favor... (si, una burla)... pero que todavía no se lo han pedido... YO NO SOY UNA FUNDACIÓN DE CARIDAD... yo veo el dinero que se mueve ahi dentro, y como amarretean con todo el mundo... hasta el punto de hacer ir y volver millones de veces a empleados externos para ir cobrando en cuotas trabajos ya realizados.

Si no dejo de ir es porque pienso que me puede servir de experiencia profesional, y demás, pero ya me tienen las pelotas llenas.